Con tan solo diez números publicados entre enero y octubre de 1873, la Revista Criminal se constituyó como la última de las tres publicaciones que, a lo largo de la década de 1870, fueron llevadas adelante por la iniciativa de algunos miembros de la Policía de Buenos Aires. A diferencia de sus antecesoras: Revista de Policía (1871-1872) y Anales de Policía (1872), la Revista Criminal fue una publicación enfocada primordialmente en la necesidad de historiar y difundir los hechos delictivos que asolaban Buenos Aires.
La revista fue dirigida por Pedro Bourel, uno de los miembros más activos de una élite intelectual de policías porteños, y contó con la colaboración de algunos civiles notables. Entre ellos, deben destacarse las ilustraciones y los retratos criminales de Henri Stein, como así también los primeros textos policiales de Eduardo Gutiérrez. En sus páginas, la revista ofrecía tanto noticias sobre el delito urbano y el consecuente accionar policial, como así también la narración de una serie de crímenes célebres del pasado. Asimismo, en sus páginas también puede encontrarse la publicación de algunos documentos exhumados del archivo policial y judicial. La venta exclusivamente por suscripción y la ausencia de apoyo institucional por parte de la Policía de Buenos Aires ocasionó que, luego de casi un año, la revista interrumpiera su aparición.