Bichobolita fue una revista amateur, anual y periódica de arte que circuló en el Gran Mendoza entre los años 1999 y 2003. Sus creadores fueron el poeta y serigrafista Ramiro Tapiz; el artista plástico Leo Pedra -a cargo de ilustrar las tapas con su mirada cotidiana-; Gabriel Oros, un historietista de fría ironía y músico lisérgico; y el escritor y poeta Claudio Rosales, quienes se ocuparon de todos los aspectos de la publicación: conseguir el papel para la impresión, reunir el material literario, componer los originales, escribir, ilustrar, juntar una moneda, organizar eventos y vender las revistas. Las presentaciones consistían en lecturas de poemas, performances insólitas, exposición de fotos, músicos en vivo, todo un collage de filiación dada-punk- decadente como la publicación misma. Algo que no significaba nada o no se entendía bien el para qué. Así durante esas épocas Bichobolita rodó por la atmósfera under-cultural de la provincia como un ritual apocalíptico e intimista más del arte contemporáneo.
Imágenes de esa época: Ramiro Tapiz con sobretodo, borcegos y el pelo corto erizado con gel habla pausado entre otros a la salida del bar de las sillas floreadas. Gabriel Oros en su casa ensaya junto a su amigo el Pollo envuelto en una bata de lamé bordó. La lectura en el patio de la Casa de los Títeres. Leo Pedra disfrazado de punk corre entre el público de un teatro. La lectura en el Microcine de la municipalidad de Capital. Un recital de “Los Queridos Feligreses” en el salón de ATE donde Claudio Rosales perdió su camisa leñadora de cuadros rojos y azules en un pogo. Todos, las chicas también, tomando porrones y mirando televisión en una cocina. Libros de poemas, cd´s, casettes y revistas under en un sillón mientras se ocupaba una mesa para armar las revistas. Un día de sol y sin épica comiendo asado en Potrerillos.
Una aclaración: el tercer número de la revista no fue publicado pero sí diseñado; se perdió adentro de un bolso deportivo azul en un asalto en el socialmente convulsionado año 2001. Los integrantes del grupo editor lo declararon desaparecido y se convirtió así en un pequeño mito privado; nunca lo rehicieron y decidieron continuar con el número siguiente.
Los números publicados de Bichobolita, condensados al paso del tiempo, quedan desde ahora como documento para la curiosidad por lo pequeño y la experiencia del arte en una ciudad de provincia.
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Durante 2008, en un intento de retomar la experiencia inicial -evoca Claudio Rosales-, la escritora Marín organizó y diseñó el n° 6 de la revista, que mantuvo título, tamaño, orden numérico y las ilustraciones de Leo Pedra para las tapas.
Bichobolita
Director: Ramiro Tapiz
Equipo de redacción: Leonardo Pedra, Claudio Rosales, Gabriel Oros
Lugar de edición: Dorrego. Guaymallén, Mendoza
Fechas de publicación: invierno de 1999-invierno de 2003 y 2008.
Dimensiones: 19 cm x 27 cm
Números publicados: 6