La revista Clarín se publicó en Córdoba entre agosto de 1926 y junio de 1927. Sus doce números constituyen el mejor testimonio de la vanguardia cordobesa de los años veinte. Su primer año estuvo dirigido por Carlos Astrada mientras que Saúl Taborda la dirigió al año siguiente. Paulina Iglesias sostiene que Clarín se inscribe en la amplia red de publicaciones culturales modernistas, reformistas y vanguardistas integrada por las argentinas Martín Fierro, Inicial, Nosotros, Sagitario, Estudiantina, Páginas, Diógenes, Juventas, Revista Oral y Valoraciones; las italianas Futurismo, Noi, e Index; las españolas Revista de Occidente y La Gaceta Literaria; las francesas Commerce y Manomêtre; la belga 7 arts; la alemana Der Sturm; la peruana Amauta, y las chilenas Ariel y Panorama. El vínculo entre ellas se expresó en la reproducción de notas, artículos y poemas, el intercambio de colaboradores, las publicidades y el intercambio directo de ejemplares (“Vanguardias en Córdoba. El caso de la revista Clarín”). En su primer número del 30 de agosto de 1926, Clarín se presentaba a sus lectores con un texto programático en el que explicitaba sus objetivos: “Hombres de esta época, removida por nuevas y promisorias germinaciones, queremos que sus íntimas voces vibren en la nuestra y, prolongándose, se enriquezcan con ajenos timbres. Sólo viviendo atentos —con vigilante sensibilidad— a su exigencia doctrinaria, a su interna pulsación, seremos fieles, en plenitud de espíritu, a nosotros mismos”.
Digitalización de AhiRa