Tramas, para leer la literatura argentina fue una revista libro editada en Córdoba, entre los años 1995 y 2000. Un grupo de docentes y estudiantes avanzados de la carrera de Letras Modernas de la Universidad Nacional de Córdoba fueron sus editores. Los números estuvieron dedicados al análisis de un escritor, o a la revisión crítica de algunos temas de la literatura argentina leída a contraluz de la política y la historia. Tres hechos le confieren un rasgo singular: un Consejo consultivo integrado por Abelardo Castillo, Ricardo Piglia y Andrés Rivera, el frecuente cambio de editores (Ediciones del Caminante, Alción Editora, Narvaja Editor, Fundación Pedro Milesi) y la existencia de dos números 1 –uno reeditado, con agregados, poco antes de que esta experiencia editorial llegara a su fin.

Al presentar aquel primer número, dedicado a Rodolfo Walsh, sus hacedores convocaban a “todos aquellos que no se sientan contenidos por el canon de lectura de la literatura argentina, todos aquellos a los que la actual política cultural no los expresa”. Se trata de una discusión a dos bandas, sobre el campo literario y la hegemonía política del menemismo. La impugnación de aquel tiempo político tenía lugar en sus editoriales. El cuerpo central de la revista proponía analizar temas literarios –sin eludir el formato académico– pensados en la intersección de un marco histórico (la década infame, los años 70), o de temas tales como el cuerpo y la sexualidad, las generaciones perdidas, la guerra y el vínculo entre literatura e historia. Su propuesta podría condensarse en un propósito: “Desestabilizar la homogeneización institucional, cultural y política que, surgiendo de los círculos de poder, ha logrado establecer un nuevo consenso”.

Tramas, para leer la literatura argentina
Director: Carlos Gazzera
Fechas de publicación: mayo de 1995 y mayo de 2000
Cantidad de números: 11 (más el 1º número reeditado)
Lugar de edición: Córdoba
Medidas: 17 x 23 cm (Nº 1 al 3) y 15 x 21 cm (del Nº 4 en adelante)

Digitalización: Sylvia Saítta